Un seguro de Ahorro es un instrumento que permite a las personas generar un ingreso futuro seguro, al apartar parte de sus ingresos actuales y colocarlos en alternativas que generen rendimientos.
Al vencimiento del plazo pactado con una aseguradora, el contratante recibirá un monto que equivale a la suma del capital invertido durante el plazo, más el interés generado (rendimientos) en aquellas alternativas donde se haya depositado el ahorro.
Al contratar un seguro de Ahorro no solo se obtienen mejores rendimientos del dinero, sino que además, dependiendo del artículo bajo el cual se contrate la póliza, pueden obtenerse beneficios fiscales y al mismo tiempo garantizar aspectos importantes para la familia, como el enganche de una casa, la educación de los hijos o el retiro.
- Ahorro para el retiro
- Ahorro patrimonial
- Ahorro para la educación
- Ahorro con beneficios fiscales para empresas
- Ahorro con protección
El interés compuesto toma en cuenta el monto de los recursos destinados, colocándolos en instrumentos de deuda que garantizan un rendimiento. El ahorro capitaliza tanto los rendimientos como las aportaciones hechas, permitiendo acumular más riqueza con el tiempo.
Un seguro ofrece certeza a través de un contrato en el cual se establecen las condiciones para indemnizar al beneficiario ante eventos cubiertos como enfermedad, invalidez o fallecimiento. En caso de invalidez, la compañía puede absorber las aportaciones futuras para que el plan continúe hasta el final.
La prima es el desembolso económico que perfecciona el contrato de seguro. Incluye el costo de la protección y el recurso destinado al ahorro. Suele ser pagadera anualmente o fraccionada según la comodidad del asegurado.
El Seguro de Retiro ofrece ventajas sobre la Afore: es accesible, flexible, no depende del patrón o gobierno, protege a los beneficiarios desde el primer día, ofrece protección contra inflación, y permite elegir el momento y forma de retiro. Es ideal para quienes desean planificar activamente su futuro financiero.